Si no sabes por dónde empezar para escribir una buena carta de presentación no te preocupes sigue leyendo este post y ¡entérate de los mejores consejos!

• Debes empezar siempre por un saludo formal pero amigable.
• Haz referencia al empleo al que estás aplicando y menciona dónde has visto la oferta.
• Dales buenas razones por las que deben contratarte.
• Haz un resumen de tu perfil profesional, mencionando los logros más destacados.
• Usa alguna frase que incite a un “call to action” es decir que les haga movilizarse para llamarte y realizar una entrevista personal.
• Despídete de forma educada donde quede claro que quedas a disposición de la empresa.
• Incluye tus datos personales para que sea más fácil alcanzarte.

Errores clásicos de una carta de presentación

• Procura que tu carta no sea demasiado larga y pesada de leer, incluye solo lo importante ya que los reclutadores deben leer muchos currículos.
• No dirigirte a la persona correcta puede confundir al reclutador, asegúrate de que te estás dirigiendo a la empresa correcta y a la persona correcta.
• No incluir tus habilidades y capacidades resolutivas; es importante destacarlas ya que si te contratan es porque buscan a una persona capaz de llevar adelante las funciones del puesto o mejorarlas.
• No empieces la carta con una frase poco motivadora, necesitas captar la atención del reclutador, así que ¡ponte creativo! pero sin perder la formalidad.
• No repitas todos los datos que hay en tu CV; recuerda que la carta es para dar información extra que no cabe en tu currículum.
• No reutilices cartas antiguas, demuéstrales que has escrito específicamente para ese empleo.

Si quieres más detalles sobre cómo escribir una carta de presentación puedes leer nuestro blog donde incluimos ejemplos y una información más detallada. Si lo que te preocupa es tu currículum ¡no te preocupes también tenemos consejos y ejemplos de cómo redactar un currículum vitae para conseguir el trabajo que deseas!

Recuerda que…

Una buena carta de presentación muestra nuestras capacidades y lo que podemos aportar a la empresa con nuestra experiencia y formación. Es una oportunidad para poder explayarnos y lucirnos pero sin llegar a ser prepotentes; también debemos darle buenas razones con fundamento que expliquen por qué somos el candidato ideal para ese puesto.

Si tienes experiencia no dudes en contarles las funciones que hacías, aunque el trabajo no sea el mismo siempre puede aportar algo ya que todo lo que haces o has hecho cuenta y suma. Incluso si estás cambiando de profesión es una oportunidad perfecta para explicar tus razones y tus habilidades para desarrollar ese nuevo puesto. Si conoces a alguien que trabaje en esa empresa a la que quieres unirte es una gran oportunidad para preguntarles e investigar sobre cómo podrías sorprender con tu carta de presentación. También podrías contactar con un empleado a través de Linkedin. Y recuerda ser siempre claro, conciso, creativo y ¡100% tu mismo!