A la hora de buscar un nuevo trabajador para que se una a la plantilla, la empresa debe tener en cuenta una serie de procesos previos a su llegada. También deberá agilizar la incorporación una vez el candidato llegue a la compañía. Con el objetivo de facilitar este recorrido tanto para la empresa como para el nuevo empleado, hemos elaborado una serie de consejos que seguro te serán de gran ayuda. 

Prepara todo lo necesario previo a la contratación

Es necesario que la empresa tenga fijados todos los aspectos relativos al contrato para su negociación en el proceso de contratación de personal. Entre estos aspectos, deberá determinar qué perfil profesional busca, con qué requisitos o qué salario ofrecer según el puesto y su valor en el mercado.

También recomendamos hacer un listado de cuáles son los documentos legales que harán falta en cada contratación. Por ejemplo: el contrato de trabajo, alta en la seguridad social, políticas de empresa… De esta forma evitaremos olvidos y será un proceso mucho más organizado.

Facilita los trámites de contratación

Una de las partes más odiadas al entrar en una nueva organización es el proceso de trámites que esto incumbe. Firma de contrato, envío de documentos de relevancia, más firmas de políticas de empresa… Si facilitamos la gestión y tramitación de todo el “papeleo”, reduciremos las labores administrativas de la entidad y aliviaremos la entrada al nuevo trabajador.

Un software de RRHH se convierte en la solución idónea para agilizar las gestiones y trámites de contratación. Esto es gracias a las herramientas que el software ofrece, como la firma electrónica o el gestor documental. Con su uso, la empresa y el nuevo trabajador podrán realizar los envíos y firmas de documentos fácilmente desde su propio móvil o desde el ordenador. Ahorrando así reuniones y esperas innecesarias. 

Ten en cuenta los periodos de formación y prácticas

Tanto la empresa como el trabajador deben ser conocedores de las condiciones relativas a los contratos de formación y de prácticas. Por un lado, la modalidad de contrato en formación no podrá exceder de un periodo superior a los dos años. Tras ello, se podrá contratar al empleado de forma indefinida o finalizar la relación laboral.

En cuanto a los contratos de prácticas, el tiempo mínimo estipulado para esta modalidad es de seis meses y el máximo que se puede permanecer es de dos años. El empleado en prácticas deberá tener una titulación universitaria, de formación procesional o un certificado de profesionalidad.

Cuenta con un manual de bienvenida

Disponer de un manual de bienvenida que entregar al nuevo trabajador facilitará enormemente su incorporación. Este documento actúa como una presentación de la compañía, recogiendo los aspectos más relevantes que los empleados deben conocer. Tiene como objetivo servir de guía de orientación, tanto en la llegada como después, cada vez que el trabajador necesite consultar alguna duda. 

El manual de bienvenida debe incluir información útil y práctica explicada de forma concisa y directa. Entre sus apartados es importante explicar la historia de la empresa junto a sus valores y misión, determinar las funciones del candidato, entre otros aspectos de relevancia como la gestión de contraseñas y acceso a los servidores.

Realiza un proceso de onboarding para su integración

El manual de bienvenida, explicado en el punto anterior, forma parte de un proceso de onboarding. Este proceso tiene como objetivo lograr la integración del empleado a la empresa y a su puesto de trabajo de la forma más efectiva posible. 

Si elaboramos un buen proceso de inducción laboral, el nuevo empleado se sentirá parte de la empresa desde el primer día, lo que aumentará su compromiso con ella y su productividad desde el comienzo. 

Ante la generalización del teletrabajo y la expansión de la digitalización, cada vez más organizaciones elaboran procesos de onboarding online haciendo uso de las herramientas digitales. Los resultados son igualmente efectivos, obteniendo un rendimiento superior en aquellos trabajadores a los que se le aplica el onboarding. Además, se logra aumentar en un 68% sus probabilidades de permanecer en la entidad los próximos tres años, reduciéndose así la rotación de personal.