Cada mañana antes del trabajo, podemos decir que todos seguimos una rutina diaria, seamos conscientes de ello o no. Te despiertas, te lavas la cara, te lavas los dientes, te vistes, igual desayunas y sales por la puerta.

Ésta rutina puede ponerte de buen o mal humor para el resto del día, pero para asegurarte de que tu día es lo mejor y más productivo posible, éstas 8 cosas deben hacerse cada mañana. 

 

1. Levantarte a la hora

Dormir lo suficiente por la noche es esencial, pero despertarse a la hora es igual de importante. Aplazar el despertador te hará flaco favor, pues pasar más tiempo en la cama sólo provocará que te sientas más cansado el resto el día. Levantarte y prepararte para el día, sin retrasos, te ayudará a estar de mejor humor y con ganas de pasar un buen día.

 

 

2. Desayunar

Recientemente ha surgido un debate acerca de si el desayuno es la comida más importante del día o no, ir al trabajo con el estómago vacío o con sólo un café no te va a preparar para el día que te espera. No desayunar tan sólo hará el día más difícil a medida que empieza a sonarte del estómago y lo único en lo que piensas es en comer algo. Tomar cereales, fruta o incluso una tostada no toma mucho tiempo, por lo que cada mañana, antes de ir a trabajar, siéntate y desayuna para asegurarte de que empiezas el día con energía y ganas.

 

3. Planea el día

Antes de ir a trabajar, puede que seas o no consciente de cuáles van a ser las tareas, aún así, es importante hacer un plan del día basándote en lo que sabes que te funciona. Apunta el tiempo que tardas en realizar cada tarea o los nombres de personas que tienes que contactar en una pequeña agenda por ejemplo. Planear el día te ayudará a saber en qué debes centrarte, para asegurarte de que haces todo a lo largo del día.

 

4. Haz una lista de objetivos para el día

Cuando planees el día, también deberías tener en cuenta los objetivos que te gustaría conseguir o que tienes que conseguir para cuando acabe el día. Escribir tus objetivos cada mañana te ayudará a recordar qué es lo que estás intentando conseguir y para qué servirá lo que hagas a lo largo del día. Una gran forma de motivarte.

 

5. Revisar los emails

Es absolutamente vital que revises los emails cada mañana antes de ir al trabajo. Tu jefe o jefa puede haberte enviado un email durante la noche para informarte de una reunión de última hora o recordarte sobre algo que tienes que llevar o tener listo para el trabajo. No quieres estar en una situación en la que has olvidado algo o no sabías sobre algo sólo por no revisar los emails.

 

6. Improvisa una charla para motivarte a ti mismo

Para prepararte para el día que te espera, guarda un par de minutos y “date una charla de motivación” a ti mismo. El hablar contigo mismo puede parecer de locos, pero una charla para preparar tu mente y estar motivado para el día puede ayudarte muchísimo. Aunque repetirte a ti mismo que eres muy bueno en el trabajo tampoco es una buena charla motivacional.

 

7. Organízate

Nada más llegas al trabajo no quieres darte cuenta de que has olvidado algo en casa o has perdido algo importante. Por eso, debes asegurarte de que tienes todo lo que necesitas. Al fin y al cabo, ser organizado significa tener todo bajo control.

 

8. Respira hondo

Las mañanas no son siempre silenciosas o calmadas, y cuando sigues la rutina, olvidas parar un momento y respirar hondo. Tu mente puede estar en la luna mientras te preparas par ale trabajo, pero cálmate, asegúrate de que estás preparado/a, respira hondo, y ve a conquistar el mundo.